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MIS CLÁSICOS de CF
TROPAS DEL ESPACIO
Robert A. Heinlein
Tropas del Espacio es una de las más famosas novelas de Heinlein que, entre otras virtudes, tiene la capacidad de generar polémica cada vez que es mencionada entre los aficionados.
En la mas pura tradición de la space opera -subgénero de la ciencia ficción que aborda las mas variadas aventuras en escenarios generalmente galácticos- la novela contiene elementos novedosos para la época en la que fue escrita y otros que adaptan estereotipos ya conocidos en la ciencia ficción.
La historia es la de Johnnie Rico, un joven de origen filipino que vive en Buenos Aires, que decide alistarse en las fuerzas especiales de
La ambientación guerrera es una mera excusa para que el autor nos cuente sus opiniones sobre el ejercito, la disciplina militar y la sociedad en general. La propuesta consiste en valorar el individualismo mas exacerbado sólo en función del servicio que pueda mostrar el individuo hacia un bien mas alto como el que es la sociedad en la que vive. En este caso, una sociedad que sólo concede la ciudadanía a los que han cumplido dos años de servicio militar activo.
La primera parte de la novela se centra en el entrenamiento de los soldados de combate. Un entrenamiento que exige la sumisión absoluta a las órdenes de los oficiales superiores. El ejército es una maquinaria que no se mueve por impulsos individuales y si por el colectivo. Es el desarrollo futuro del perfecto soldado que es sólo una pieza del ajedrez movida por sus mandos. Conceptos como libertad, libre albedrío u opinión quedan desterrados pues no se conciben en este ejército. Sólo cuando se ha alcanzado la licencia se gozará de esta “libertad“ al ser declarados ciudadanos.
Los personajes hacen un declarado alegato sobre las bondades de la fuerza bruta para imponer las doctrinas o filosofías de la “nación” en este caso la élite de ciudadanos que son capaces de votar. Los ejércitos son sólo una herramienta que obedece a un poder civil, que a su vez emana del ejército que es el que nutre a la ciudadanía. Un círculo perfecto del que no se puede escapar. Sin embargo, y en una contraposición muy estudiada, el individualismo es el que triunfa. Pese a todos los esfuerzos por mostra las cualidades de colectivo fuerte – el ejército- frente a la mas intensa unidad tipo colmena de las Chinches, será un solo individuo el que decida una batalla al final de la novela. El sargento Zim dará un vuelco a la historia que hará vislumbrar un futuro mas favorable para la humanidad. Es la victoria de la forma de vida norteamericana sobre la comunista soviética representada por los insectos.
Estas “soflamas” están tan bien descritas que se hacen atractivas, no en el fondo pero sí en la forma. Y el lector se ha de preguntar si el autor se posiciona a favor de esa sociedad, militarista y muy poco democrática, o está lanzando, por medio de la exageración, mensajes sobre todo lo contrario. Algunos pasajes abonan esta última impresión al deslizar detalles que serían definitorios y clarificadores. Rico, al presentarse en las dependencias de reclutamiento del ejército y ser admitido en
Por todo ello la crítica no se pone de acuerdo en cómo considerar la novela. ¿Es el epítome del pensamiento conservador ultraliberal norteamericano, o es todo lo contrario? Repasando otras historias del autor desde luego no lo parecería.
En el terreno de la pura ciencia ficción la novela se desarrolla dentro de unos cánones de “credibilidad”. Heinlein es capaz de dar verosimilitud, como en casi toda su obra, a todos los elementos científicos que describe. Uno de los aciertos, y que han desarrollado escuela, es el de la armadura de combate de la tropas IM. Esta armadura potencia y multiplica la fuerza del soldado y le provee de múltiples armas. Iron Man (El hombre de hierro), de las historietas Marvel, es deudor de esta tecnología de armaduras.
Tropas del espacio se considera uno de los grandes clásicos de la ciencia ficción, que es reeditado una y otra vez, y que mereció en 1960 el premio Hugo a la mejor novela. Inspiraría otras obras entre las que está La guerra interminable (Joe Haldeman) que es la misma historia desde otro prisma ideológico.
(USA, 1907-1988)
Heinlein estudió en la academia Naval de EEUU, licenciándose con el grado de teniente y posteriormente física y matemáticas en UCLA y también. Su formación militar y científica esta presente en casi todas sus obras. Pese a ser un autor “fácil” de leer, sus relatos nunca adolecen de inconsistencias científicas mas allá de la habituales al tratarse de ficción.
Empezó a publicar regularmente una vez acabada
Su obra editada en España es bastante accesible. Algunas de las ediciones de sus novelas son las siguientes: Job: una comedia de justicia, El número de la bestia, Tiempo para amar, La luna es una cruel amante, Forastero en tierra extraña, Tropas del, Las 100 vidas de Lázarus Long, Puerta al verano, Estrella doble, La bestia estelar o Amos de títeres.
Javier Márquez Sánchez
Editorial ALMUZARA
En un remoto pueblo inglés cercano a Escocia, llamado Longtown, un cartero hace su ronda habitual descubriendo que algo malo ha pasado en él. Todos sus habitantes han muerto de manera horrible. La investigación de los hechos es encargada al inspector de Scotland Yard Andrew Carmichael que descubre una relación entre la proyección de una película y los acontecimientos . El filme no es otro que “La fête du Monsieur Orphée,”, mítico film hollywoodiense de los años veinte que ha permanecido oculto por treinta años y del que se tienen las peores referencias sobre su contenido. En el camino de la investigación se cruzará el actor Peter Cushing que prepara su papel de Dr. Frankenstein en el remake de la historia de la Universal y que produce la Hammer. Cushing también busca esa película por motivos diferentes que no son ni mas ni menos que entender el “miedo” para poder expresarlo en su película.
Varias cosas serían destacables en esta primera novela de Javier Márquez que la separan de otras producciones de índole “policiaco” y misterioso. Para empezar la introducción del misterio, en el primer capítulo, es tan visual que nos sitúa en una de los famosos introitos de la serie británica “Los Vengadores”. El homenaje está ahí y los lectores avezados sólo esperan que aparezcan en escena John Stedd y la Sra. Peel, cosa que hacen encarnados en el inspector Carmichael y el detective Harry Logan, ambos especializados en sucesos de extraños. Continuamos con una lección de historia del cine cuando asistimos a la consolidación de la productora Hammer Films que tanto contribuyó al auge del cine de terror, y fantástico en general, en las décadas de 1960 y 1970. La combinación de personajes reales, todos los que participan en el rodaje de Frankenstein, Lee, Fisher, Carreras o Karloff, contribuye a crear un clima de suspense mas allá de los hechos que el autor nos narra. La ficción se mezcla con la realidad, ficticia también por supuesto, contribuyendo a dotar a la novela de una solidez en las historias que se nos cuentan.
Por otra parte encontramos un escenario general que es puramente cinematográfico. La novela está tan bien afinada en cuanto a tempos que cada capítulo puede ser perfectamente una escena de un film de la Hammer. El homenaje pasa a ser casi un guión perdido de esta productora en el que parece que el lector se asoma al rodaje de una nueva película que a su vez recrea el rodaje de un filme ya existente.
Para los que gustan de encontrar referencias a otras obras esta es su novela perfecta. Como ya he comentado hay homenajes velados a otras obras tanto cinematográficas o literarias, pero también los hay muy directos. La reinterpretación del suceso que conmovió a Hollywood en los años veinte, que protagonizara Roscoe “Fatty” Arbuckle, es uno de los guiños a la historia más sórdida del cine. Pero la fugaz aparición de Adso de Melk contentará a los buscadores de referencias literarias, haciéndoles esbozar una sonrisa. No es menos obvia el homenaje a “Asalto a la comisaría del distrito 13” o quizá en este contexto a la película, también de John Carpenter, “Prince of darkness”.
Añadimos a todo lo anterior la facilidad con la que Márquez desarrolla su texto. Los saltos de escenario no suponen un esfuerzo lector y la lectura fluye en una línea temporal constante. Las explicaciones de sucesos anteriores vienen de la mano de los propios protagonista ya sea por medio de diálogos con los protagonistas, o mediante el recurso de la espistolaridad, que vuelve a retomar la esencia de las historias de la Hammer o del terror gótico del siglo XIX. La prosa sencilla y contundente explica la agilidad de lectura de esta novela que en ningún momento pierde fuelle en la habilidad para mantener al lector atento a lo que está ocurriendo.
Para ser una primera incursión del autor en la novela, anteriormente había publicado varios ensayos muy interesantes – entre otros Paul Simon & Art Garfunkel. Negociaciones y canciones de amor (Milenio, 2004), Rat Pack. Viviendo a su manera (Almuzara, 2006) y Elvis. Corazón solitario (Almuzara, 2007)-, podemos decir que pasa el examen con un notable alto. Indudablemente Javier Márquez es, entre otras cosas, un cinéfilo y aficionado a los géneros, tanto literarios como cinematográficos, y eso se nota mas que de sobra en la construcción de la novela. Ha escrito un texto que gustará a los aficionados curtidos, pero que también gustará a los no “iniciados” pues las referencias “eruditas” no perjudican o paralizan la lectura del manuscrito, sólo lo completan.
© Alfonso Merelo 2009
Javier Márquez Sánchez (Sevilla, 1978), es periodista y escritor, subdirector de la revista Cambio 16, y colaborador habitual de Esquire, La aventura de la Historia, Cuadernos para el Diálogo, Interfilms, Efe Eme o Beta. Apasionado de la literatura de detectives, fantástica y del cine de género.