INTRODUCCIÓN.
Leopoldo Alas Clarín
no está clasificado de ninguna de las maneras como autor de ciencia
ficción. Su literatura es de todo menos fantástica. El autor de La
Regenta es recordado como uno de los escritores realistas del siglo
XIX en España. Pero también se le identifica como un auténtico
maestro del cuento o relato corto.
Traemos a estas líneas
uno de sus relatos que pueden ser calificados de geniales. Se trata
de Cuento Futuro, una sátira sobre la sociedad y la religión que
contiene tantos elementos interesantes para la temática que nos
mueve que no podíamos pasarlo por alto.
- EL AUTOR
Leopoldo
García-Alas y Ureña Clarín nació en Zamora en 1852 y murió
en 1901 en la ciudad de Oviedo. A esta última se traslada en 1865
donde estudia el bachillerato, convirtiéndose en su tierra de
referencia, como todos saben La Regenta, su novela cumbre, trascurre
en una ciudad llamada Vetusta que no es otra que Gijón. Acabada su
instrucción básica llega a Madrid, en 1871, donde estudió Derecho
y obtuvo su doctorado. En 1883 vuelve a Asturias donde aprueba la
Cátedra de Derecho Romano, aunque no toma posesión de ella ya que
el ministro de instrucción pública, Queipo de Llano Conde de
Toreno, lo vetó y le dio la plaza al segundo opositor. Naturalmente
se trataba de una venganza por los artículos que Clarín
venía escribiendo en contra del Conde. Cinco años después pudo
ocupar la obtuvo cátedra de Derecho Natural.
Su seudónimo procede de
su trabajo en el periódico El Solfeo en 1875. El director
decidió que los redactores firmaran con un seudónimo de instrumento
musical. Leopoldo Alas eligió el clarín y desde ese momento
firmaría siempre con ese nom de plume. Escribió su primer artículo
con ese nombre el 2 de octubre de 1875 y a partir de entonces sería
el alias con el que firmaría todos sus artículos.
Clarín es uno de
los escritores más destacados del siglo XIX, junto con Pérez
Galdós. Su obra cumbre es La Regenta, pero en su gran
actividad literaria fue articulista, crítico, ensayista, autor
teatral… Cultivó todas las formas de literatura, incluyendo algo
de poesía, y fue uno de los críticos literarios más ingeniosos y
despiadado que ha producido este país. En su época los autores
escribían para contentar al catedrático de Oviedo que se
convirtió en una especie de dios de la literatura que se ensañaba
con los novatos y que, en algunos casos, condescendía con los
consagrados. Todos los biógrafos coinciden en que nunca aceptó
ningún obsequio de nadie y que fueron sus criterios los que siempre
expuso, equivocados o no.
- CUENTO FUTURO.
Este relato se publicó
recopilado en un volumen genérico de cuentos titulado El Señor y
lo demás, son cuentos, editado en Madrid por Manuel Fernández y
Lasanta en el año 1893. Este cuento entra dentro de la categoría de
los satíricos–religiosos, de los que el autor pergeñó algunos
más –como el titulado Protesto sin ir más lejos. Pese a su
anterior etiquetado, creo que el cuento reúne todas las
características para ser incluido dentro de la ciencia ficción,
pese a haber sido escrito antes de que el término apareciera en la
literatura. Contiene una visión sociológica de un supuesto fin del
mundo que la convierte en una novela apocalíptica, subgénero del
que tenemos decenas de incursiones por parte de los autores de
ciencia ficción; y si a estos relatos los consideramos plenamente
pertenecientes al género, no podemos excluir a Clarín como autor
tangencial y por tanto hay que darle acogida dentro de esta historia
de la ciencia ficción española.
“La humanidad de la tierra; se había cansado de dar vueltas mil y
mil veces alrededor de las mismas ideas, de las mismas costumbres, de
los mismos dolores y de los mismos placeres. Hasta se había cansado
de dar vueltas alrededor del mismo sol.”
Así
comienza este cuento: la frustración de todos los seres humanos, el
hastío de la repetición es el leiv motiv de esta fábula. Un poeta
francés escribe una oda contra el “sol y el movimiento perpetuo de
la Tierra a su alrededor”. El texto tiene tanto éxito, sobre todo
en los países ecuatoriales que están hartos de tanto calor, que la
humanidad se plantea la posibilidad de “apagar” el sol. Se
instala en el mundo la “Heliofobia” y se alientan teorías para
dejar libre a la Tierra de su órbita y que ésta vuele libre por el
cosmos. Los únicos opositores a estas ideas son los obispos que
arropan a los “heliófilos”.
El Dr. Judas Adambis,
creador de la vacuna contra el hambre, se hace protagonista de la
historia cuando publica una “epístola universal”, opúsculo
donde propugna el suicidio universal como método definitivo para
acabar con el hastío. Salvo excepciones, la iglesia por supuesto,
todos los gobiernos y los ciudadanos admiten el suicidio como
solución para la crisis de la humanidad. Las minorías que no desean
esta solución no serán asesinadas sino “suicidadas”. El día de
año nuevo, un año indeterminado en el futuro, a las 12 de la
mañana, Adambis activa su invento y la humanidad deja de existir.
Mas no todos, pues el científico y su esposa sobreviven gracias a
las malas artes de él que ha proporcionado un antídoto a su mujer
Evelina y a él mismo. Los dos supervivientes viajarán en una
especie de globo autopropulsado hasta que se les aparece Dios, el
auténtico, el de la Biblia y el Nuevo Testamento. Este personaje
legendario les propone que ellos sean los nuevos artífices de la
humanidad y sólo impone una condición no comer de un manzano que
hay allí, es decir exactamente lo mismo que se propuso a Adán y
Eva. Evelina, dada su mala cabeza, comerá del fruto prohibido porque
–no le gustan las otras manzanas- pero Judas resistirá la
tentación y restará en el paraíso pro siempre ya que le es dado el
don de la inmortalidad.
Como el lector puede
deducir el cuento es una fábula moral sobre el bien, el mal, la
religión y las creencias. Clarín no se priva en ningún momento de
mostrar su misoginia, Evelina es un estereotipo de la mujer ligera,
dominante y casquivana, y sus reticencias hacia la moral católica
imperante. El mismo nombre de los personajes dan una pista al lector
de las intenciones del autor; Judas (traición en este caso a la
humanidad), Adambis (Adam dos o Adam segundo) y Evelina (claramente
una segunda Eva). Pasamos de un relato apocalíptico de ciencia
ficción a un relato bufo de corte religioso-moral.
La ciencia ficción está
presente en multitud de ocasiones y por eso figura en esta historia.
El relato trascurre en un futuro indeterminado en el que la humanidad
ha avanzado notablemente. Todos los habitantes de La Tierra poseen
una amplia cultura y de ahí que acepten filosóficamente el
suicidio. La tecnología también posee un alto grado de eficiencia y
novedad. Los globos de trasporte son un ejemplo, pero también se
habla de la comunicación con el Planeta Marte y la posibilidad de
mover la Tierra de la órbita. Es particularmente interesante la
descripción del suicidio colectivo, o asesinato en masa si se
quiere, y sus resultados con todos los cadáveres apilados unos
encima de otros. Lamentablemente esas escenas se trasformaron en
reales años después durante la masacre nazi a los judíos.
Sin embargo podemos
decir que esta es la excusa perfecta, como siempre ocurre en el campo
de la ciencia ficción que podemos llama sociológica, para lanzar
una diatriba contra la humanidad en general, los políticos y la
iglesia en particular. Su conclusión es muy clara: la humanidad no
merece seguir viviendo y ni siquiera se le puede otorgar una segunda
oportunidad. En ese particular Clarín se muestra implacable:
no tenemos remedio y cuanto antes desaparezcamos de la faz de la
Tierra mejor.
Merece la pena recuperar
este relato, que se pude encontrar sin problemas en internet, y tener
un visión de esa proto-ciencia ficción que se escribía en España
a finales del siglo XIX y principios del XX. El cuento es plenamente
disfrutable y se lee con una sonrisa permanente. Lamentar que Clarín
no volviera a tocar el tema porque teniendo en cuenta su gran
habilidad narrativa para la ironía es de suponer que podría
habernos deleitado con relatos fantásticos de buena factura. Nos
conformaremos con sus relatos realistas que son de lo mejor de la
producción española de todos los tiempos.
1 comentario:
Buenas tardes, soy Kike, de la publicación cultural Universo la Maga (www.universolamaga.com). Estaríamos interesados en entrevistarte, por favor escríbeme a kike@universolamaga.com
Muchas gracias y un cordial saludo
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