martes, diciembre 02, 2014

JAGANNATH





Jagannath, Karin Tidbeck, Nevsky Prospects

La editorial Nevsky Prospects está realizando una labor muy interesante al publicar autores de una lato nivel en sus libros.  Concretamente la colección Fábulas de Albión han editado a Alexei Tolstoi, con su Aelita, a Lovecrafft en una nueva traducción de La sombra fuera del Tiempo o la muy interesante El vivo de la autora rusa contemporánea Anna Starobinets. Pero también han aportado a los aficionados la antología Steampunk. Antología Retrofuturista, en la que autores españoles realizaban un ejercicio de interpretación del steampunk.
El libro que traemos hoy aquí, una antología de relatos, es la primera publicación de la autora sueca Karin Tidbeck, que curiosamente publica en inglés directamente muchos de sus relatos, entro otros algunos incluidos en este libro. En muchos de estos cuentos, la autora utiliza leyendas nórdicas para ambientar sus historias. Son leyendas benignas, buenas en definitiva, que sacuden al lector pero de una manera agradable las más de las veces.  He quedado gratamente sorprendido de la riqueza de matices que contienen los relatos. Las expresiones de sentimientos, de sensaciones, acercan al lector a esos parajes desconocidos y extraños que se hacen cercanos a la cotidianidad gracias a unos personajes que destacan por su fuerza expresiva.
El título de la antología, Jagannath,  es una extraña palabra que no tiene equivalente en nuestro idioma. Al parecer deriva de una expresión en sánscrito que significaría Señor del Universo, es decir Dios, o sus avatares Visnhu o Krishna. Pero, como ya he dicho antes, las mitologías contempladas en los cuentos no tienen nada que ver con la hindú, y en todo caso se aproximarían a unas reelaboraciones de varios mitos nórdicos, aunque tampoco sean los convencionales emanados del Reino de Asgard.

Beatrice podría considerarse una historia de amor en un entorno steampunk. En él, un médico se enamora de un zepelín cuyo nombre es el que da título al cuento.  En otro lugar, una mujer, hija de un impresor muestra su amor por una bomba de vapor Hércules. Estas imposibles historias de amor se entremezclaran cuando las dos parejas se encuentren y surge otro romance. La inverosimilitud de la situación es tratada de una manera tan singular que el relato se hace creíble en ese entorno particular.
En Las Cartas a Ove Lindström”, se narra una antigua leyenda de los bosques en los que los habitantes de éstos se mezclan con los humanos. A diferencia de otras historias similares, aquí el terror está ausente y el hecho se muestra como lo más normal.
La señorita Nyberg y yo recrea la búsqueda de la vida por parte de la amiga de una escritora, que es la narradora del relato. Entronca con la tradición judía del golem e incluso con la película Amanece que no es poco de Jose Luis Cuerda. Si allí los hombres crecían en el huerto, aquí es un pequeño gnomo el que nace de una maceta.
Rebecka habla de la autodestrucción, de la caída hacia el infierno de las drogas. Como en todos los cuentos el enfoque fantástico se concreta esta vez a con un trasfondo religioso.
Herr Cederberg es el más cortito de los relatos, en el que un hombre marginado concreta sus sueños en la fabricación de cometas y aviones de aeromodelismo.
¿Quién es Arvid Pekon? Uno de los relatos que más me ha impactado. De resonancias claramente Kafkianas, la autora nos sumerge en un terrible mundo donde la percepción de la realidad no es lo que parece. ¿Vivimos dependiendo de la percepción que los demás tienen de nosotros? ¿Y si los demás deciden ignorarnos totalmente?
El complejo de vacaciones de Brita expresa los sentimientos de amistad y de compañía. Bien es cierto que esa compañía es un tanto extraña. Una fantasía de sentimientos y sobre todo de descubrimiento de la amistad.
La montaña de los renos cuenta una nueva leyenda, probablemente inventada, de las tierras del norte. El tío Johann vive feliz en su cabaña conviviendo con seres que bajan de las montañas, pero que son cercanos y totalmente normales en ese entorno. Un marco referencial muy cuidado para otro de los excelentes cuentos de la antología
Mermelada de mora ártica también habla de la creación de vida, un homúnculo que se desarrolla y al que le encanta la mermelada de moras. 
Pyret [P Y: R E T]. Descripción, comportamiento, historia, es un falso ensayo que describe a un animal fantástico inexistente. En este relato hay un cambio de estilo al tratarse de un remedo de artículo científico expresado con su lenguaje y las particularidades propias de una investigación científica, falsa naturalmente.
Augusta Prima es un cuento de hadas invertido, es decir el mundo real es el de las hadas y el fantástico el de los hombres. Este cuento se encardina con el siguiente Las Tías en el que unas personas se dedican a comer y engordar al cuidado de unas famélicas sobrinas. Las tradiciones son las tradiciones y las sobrinas tendrán que tomar decisiones muy drásticas-
 Por fin, Jagannath, es el cuento que da título a la antología y que cierra la misma. Es un relato de ciencia ficción, que puede recordar en parte a los universos de naves generacionales. Pero la narradora nos  sorprenderá con una vuelta de tuerca final inesperada.
La fantasía de Tidbeck es muy diferente a la habitual. Tiene los elementos clásicos en muchos casos pero los mezcla con una gran habilidad con la cotidianidad por lo que el choque entre los dos mundos se ve amortiguado. El lector ve todo casi normal, en su entorno fantástico las cosas pasan porque son así, y a nadie parece extrañarle. 
Una antología que no debe dejar pasar el aficionado. Una verdadera joya de la literatura en corto.

lunes, noviembre 03, 2014

SINDBAD EN EL PAIS DEL SUEÑO.





 JUAN MIGUEL AGUILERA.

El capitán Sindbad (Simbad para los más antiguos) es un personaje mítico surgido de las historias de Las Mil y Una Noches. El personaje, atractivo en si mismo desde la literatura, se hizo muy popular en los años 60 y 70 gracias a sus versiones en el cine. Los que tenemos ya ciertos años, Aguilera es uno de ellos, disfrutábamos de extraordinarias aventuras con títulos míticos como Simbad y la Princesa o El séptimo viaje de Simbad , y aquellos extraordinarios efectos especiales de Ray Harryhausen. Esa nostalgia y ese sentido de la aventura y de la maravilla, aunque resulte tópico, es el que impregna esta novela que protagoniza Sindbad.
Juan Miguel Aguilera es uno de los autores de género fantástico más reconocido en el panorama español. Lleva más de 25 años  escribiendo algunas de las más interesantes páginas en español tanto de ciencia ficción como de fantasía. Suya, junto a Redal, es la impresionante saga de Akasa Puspa o novelas como Rihla, Némesis, El sueño de la razón o La locura de Dios. De entre su producción es interesante destacar una faceta que se prodiga en diversos títulos: Aguilera es un estupendo relator de viajes. En muchas de sus novelas el armazón literario es un viaje. Un viaje, generalmente iniciático, que afecta a los protagonistas modificando su estilo de vida y sus perspectivas. Los acontecimientos en que se ven envueltos los personajes son una mera excusa para describir ese viaje. Es el viaje en sí, y los cambios de escenario, los que destacan en esas novelas. En las descripciones de estos viajes, en ese espíritu aventurero, es uno de los mejores narradores que tenemos actualmente.
Siendo Sindbad un capitán de barco, es natural que esta novela sea también, entre otras cosas  un viaje que el protagonista, con algunos compañeros, realiza al País del Sueño.  Este lugar es la patria de los djiins, los demonios descritos en el Corán que aquí se asemejan mucho a los vampiros. El capitán viajará hasta allí en pos de dos cosas: por un lado la venganza contra el gran visir y por otro lado una mujer que le ha enamorado. En ese viaje, Aguilera, suelta la pluma para describir batallas sin fin entre demonios y hombres. En este aspecto el autor es un maestro de la descripción de enfrentamientos –ya lo hizo en Rihla magníficamente-; la batalla entre las tropas europeas, embajadores de Carlo Magno, y los antes citados djiins  es espectacular. Si quieren leer acción cinematográfica la tienen perfectamente reflejada en esos párrafos.
Técnicamente Aguilera utiliza con profusión el diálogo para contarnos mucho de la historia. Esto produce una agilidad de lectura que descansa al lector y lo introduce de una manera rápida en la trama de la novela. Los capítulos cortos, que producen cambios de escenario, proporcionan también agilidad añadida. Al tratarse de una novela coral, en la que incluso uno de los protagonistas secundarios es un demonio, los personajes no tienen exceso de profundidad, pero esto no es malo ya que lo que se describe nos es otra cosa que las vicisitudes de un viaje peligroso desde una mirada aséptica y distanciada. Somos meros observadores de la película de Sindbad, porque este libro es de los más cinematográficos de Aguilera, junto con Rihla.
El autor ha hecho un buen trabajo de investigación para reflejar los escenarios y las costumbres de la época. Hay un pasaje en el que el capitán Sindbad ha de proporcionar dinero, o mejor dicho víveres, a las familias de los marineros puesto que no han podio repartir las ganancias y ya tienen que partir. Eso era una costumbre de la época y las familias sólo recibían dinero cuando volvían sus padres y esposos. El resto del tiempo tenían que sobrevivir como podían. Uno de los personajes que aparecen en la novela, el erudito Yahiz, es un personaje real que fue un precursor de Darwin e  inventó el concepto de evolución mil años antes que él inglés.
La edición del libro cuenta además con ilustraciones en sus páginas y código QR que llevan a enlaces a los que se puede acceder para completar información. Uno de ellos lleva, por ejemplo, a los viajes de Sindbad en la traducción de Blasco Ibáñez  de Las mil y una noches. Otros proporcionan información detallada de diverso aspectos de la sociedad y de las costumbres en el Califato de Bagdad.

En resumen decir que encontrarán en Sindbad en el país del sueño una novela de aventuras en toda regla, vertiginosa y espectacular. Para disfrutar.

Publicado previamente en ScifiWorld